Madama Butterfly Collection es fruto de un viaje fascinante hacia el descubrimiento de la cultura japonesa y sus reflejos en el mundo europeo. Un homenaje a la obra homónima de Giacomo Puccini, que se caracteriza por un perfecto equilibrio entre libertad compositiva y rigurosa geometría, entre lógica y sentimiento.

CONCEPT

El objetivo es el de transmitir una elegancia sosegada y abigarrada, evocando la emoción de un encuentro entre Oriente y Occidente, entre contemporaneidad y tradición, así como entre materiales diferentes, creando efectos inéditos.

La figura de la geisha, Madame Butterfly en este caso, es el personaje principal que anima la escena. Una silueta imaginaria que se mueve en espacios arquitectónicos definidos por tonalidades tenues y ritmos precisos, interrumpidos por cambios de secuencia y reforzados con estilemas naturales, como juncos y hojas.

 

En un universo intenso y onírico, entre el interior y el exterior, todo se rige por un orden preciso y una armonía original, que hacen que esta colección sea atemporal.

 

Cómo se estructura la colección

Madama Butterfly Collection está compuesta por cinco temas cuyos nombres evocan algunos de los versos más poéticos de la obra de Puccini. Cada uno de ellos está formado por una combinación de elementos en diferentes materiales que dialogan entre sí gracias a la presencia de un fin perfil de unión dorado.

El resultado es una propuesta de revestimientos murales con dimensiones predefinidas, que tienen la misma altura de tres metros, pero diferentes anchuras, característica que confiere a los profesionales una enorme autonomía compositiva y decorativa.

Con este concepto innovador, Glamora ha creado una colección que se caracteriza por un fuerte carácter sensorial, ampliando los cánones tradicionales de la decoración mural y transformando los revestimientos murales en una auténtica instalación arquitectónica integrada en el proyecto de interiorismo.

 

 

Materiales y paleta cromática

Glamora ha desarrollado una serie de materiales con alma natural pensados para combinarse en armonía entre sí, expresión de una mirada que abraza contemporaneidad y tradición. Entre ellos, GlamBirch, una ligera lámina de abedul que enfatiza la esencia cálida e la madera. GlamRafia, elaborado con fibras vegetales trenzadas, definido por un ritmo visual denso e irregular que juega con la luz multiplicando sus efectos. GlamCork confía su belleza matérica al corcho blanqueado y es capaz de regalar a los espacios una atmósfera elegante. Y, por último, GlamVelour, suave al tacto y a la vista como el terciopelo, pensado para embellecer el espacio con delicadeza en una paleta de tonos tenues. Materiales que viven en combinación con GlamPure, tejido no tejido realizado en lino y viscosa 100 %, y con GlamSatin, viscosa con polvo mineral caracterizada por un acabado especial iridiscente que evoca los destellos de la seda.

 

La paleta cromática que emerge es una sinfonía entre los tonos de gris, rosa, marfil y crema, ideal para interiores refinados y contemporáneos en diálogo constante entre el minimalismo y el amor por la decoración.La paleta cromática que emerge es una sinfonía entre los tonos de gris, rosa, marfil y crema, ideal para interiores refinados y contemporáneos en diálogo constante entre el minimalismo y el amor por la decoración.